Relación de artículos y noticias |
El desarrollo sostenible es una tendencia horizontal, que abarca a todos los sectores y ha llegado para quedarse. Lo demandan las nuevas normativas, los clientes, los mercados financieros y la sociedad en su conjunto. Inclusión, dentro y fuera de la empresa; transparencia y gobierno corporativo; códigos éticos; modelos de carrera profesional; cumplimiento en el pago de impuestos; modelo medioambiental y energético o bienestar social, son algunas de las áreas que cobran cada vez mayor importancia en la estrategia de las empresas.
La transición energética es una realidad imparable. La necesidad social, económica y medioambiental de avanzar hacia un modelo de producción bajo en carbono se ha visto acompañada por un desarrollo tecnológico que, en muchos ámbitos, ha convertido a las energías renovables en la alternativa más eficiente en costes, además de la más limpia. Estamos ante una revolución económica e industrial capaz de atraer inversiones, producir ganancias de competitividad, aumentar la riqueza y generar empleo.
Hoy en día ocupan cargos políticos personajes sin ningún título académico ni cualificación; algunos con diplomas obtenidos fraudulentamente, como hemos conocido en los últimos años, y otros, lo acabamos de ver, dispuestos a subirse el salario en el Congreso sin haber renunciado ni a las dietas cuando el resto de los ciudadanos padecen las consecuencias económicas de la pandemia. Mientras, el espectáculo público que están dando es el que es, sobran los calificativos.
Estamos asistiendo ya a una gran pelea entre fábricas entre distintas partes del mundo para atraer nuevos modelos, especialmente los de futuro, como los eléctricos y los híbridos enchufables. El hecho de que no existan centros de decisión en España no hace más que incrementar el riesgo a futuro de nuestra industria
El impacto de la crisis del coronavirus sigue avanzando en las empresas y el empleo a pesar del inicio del desconfinamiento y de la batería de medidas de apoyo a los ERTE. Así lo muestra un estudio del Consejo General de los Colegios de Gestores Administrativos, que concluye que en un futuro inmediato cerrarán 240.000 pymes, de las cuales 135.000 se habrán acogido a un ERTE.
Donde más claramente se pone de manifiesto el impacto de la pandemia en España es en el mercado laboral, donde ya se contabilizan 5,5 millones de empleos afectados, si se suma la caída en la afiliación, los trabajadores en un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) y los autónomos que han sufrido una drástica caída de ingresos.